A partir del próximo mes
de julio todas las parejas francesas que acaben de tener un hijo podrán
disfrutar de seis meses adicionales de permiso temporal de paternidad. Con una
condición: que sea el hombre quien deje su trabajo... Esta medida, toda una
revolución en un país que no se caracteriza por ser de los más avanzados en la
materia de paridad, es la novedad simbólicamente más importante del proyecto de
ley para la Igualdad entre los Hombres y las Mujeres, actualmente en discusión
en el Parlamento. Aprobada por el Gobierno el verano pasado a iniciativa de la
ministra de los Derechos de las Mujeres, Najat Vallaud-Balkacem, la nueva norma
recibió en septiembre la luz verde del Senado y entre los próximos días 20 y 24
debe ser discutida y aprobada por la Asamblea Nacional.
La reforma del permiso de paternidad entrará en vigor, en
principio, el 1 de julio. Hasta ahora, además de la baja de maternidad a la que
tiene derecho la madre antes y después del parto –16 semanas, durante las
cuales se percibe el 100% del salario–, las parejas con un hijo podían pedir un
permiso adicional de paternidad de seis meses, bien para dejar temporalmente el
trabajo, bien para reducir su jornada laboral, llamado Complemento de Libre
Elección de Actividad. El progenitor que se acoge recibe durante este tiempo
una ayuda pública de entre 330 y 573 euros al mes, en función de si su
dedicación es parcial o deja totalmente el trabajo.
A partir del próximo verano, la misma pareja podrá tomarse
otros seis meses adicionales, a condición de que el beneficiario sea el otro
progenitor. De forma análoga, las parejas con dos hijos o más, podrán encadenar
hasta tres años de permiso a condición de que seis meses sean asumidos por el
otro miembro. En la medida en que los permisos están dirigidos indistintamente
a la mujer y al hombre, se habla siempre del “otro”. Pero lo cierto es que el
“otro” acostumbra a ser el hombre: de los 600.000 beneficiarios de esta ayuda,
el 97% son mujeres. Y el Gobierno aspira a que los usuarios masculinos pasen de
los 18.000 actuales a 100.000 de aquí a finales del año 2017.
Un sondeo del instituto de opinión Ifop ha confirmado que el
89% de los franceses ven cn buenos ojos esta reforma. Pero ¿es eso indicativo
de la respuesta que darán en la práctica? La Unión Nacional de Asociaciones
Familiares (UNAF) no está muy convencida. Por el contrario, considera que muy
pocos padres se acogerán –o “podrán acogerse”– a este permiso, lo que
conllevará en ciertos casos una “amputación” de los derechos actuales de las
familias. Eso puede ser así en el caso de la parejas con más de dos hijos, que
ya disfrutan hoy de hasta tres años de permiso, pero sin condición ninguna.
No hay comentarios:
Publicar un comentario