La infidelidad de Hollande

A los franceses les gusta decir que Francia es un país ingobernable. En todo caso, el corazón de sus presidentes claramente lo es. François Hollande no ha resultado una excepción. Unido sentimentalmente desde el 2007 a la periodista Valérie Trierweiler, por quien abandonó a su primera mujer y madre de sus cuatro hijos, Ségolène Royal, el presidente francés mantiene desde hace varios meses una relación amorosa con la actriz Julie Gayet. Así lo ha revelado el semanario Closer, que en su número aparecido ayer en los quioscos publica imágenes de Hollande –o de quien parece ser Hollande, oculto el rostro bajo un casco de moto– y de su presunta amante entrando y saliendo de la finca donde se encontraban hasta ahora clandestinamente. El presidente de la República reclamó ayer respeto a su vida privada y amenazó a la revista con perseguir a la publicación por la vía judicial, pero no desmintió la información. La primera dama no hizo comentarios.

El adulterio no es delito en Francia y los franceses son extremadamente tolerantes en esta materia. Pero esta información, por el momento en que aparece, puede agravar la ya de por sí delicada situación política de Hollande, cuyo nivel de impopularidad bate todos los récords de la V República. Su antecesor en el Elíseo, Nicolas Sarkozy, empezó su descenso a los infiernos en enero del 2008, cuando se hizo público su romance con Carla Bruni. Los franceses tuvieron entonces la impresión de que el presidente estaba realmente más preocupado por sus intereses personales que por los del país. Nunca más llegó a recuperarse del todo.

Hollande, que se enfrenta ahora la misma situación que Sarkozy hace seis años –conferencia de prensa internacional incluida, el martes en el Elíseo– puede sufrir un juicio parecido, en un momento en que Francia sigue sumida en la crisis y el paro continúa subiendo. Por lo demás, la forma en que el presidente ha mantenido esta relación secreta, tal como la relata el semanario, plantea asimismo interrogantes sobre la seguridad del jefe del Estado, que se desplazaba a sus citas galantes en una moto y acompañado por uno solo de sus guardaespaldas.

Según Closer, François Hollande y Julie Gayet, cuya relación dura al menos desde hace un año, pasaron juntos las noches de los pasados 30 de diciembre y 1 de enero en un apartamento propiedad de unos amigos de la actriz en una calle muy cercana a Elíseo. En los dos casos, Julie Gayet acudió en primer lugar, y media hora después –cubierto con un casco– llegó el presidente, una vez que su guardaespaldas había inspeccionado someramente los alrededores. La forma de proceder parecía sacada de una película de espías: Hollande, según parece, abandonaba su coche oficial en un parking cercano, del propio Elíseo, y allí montaba a la grupa de un scooter. Closer fotografió todas las idas y venidas, incluyendo al guardaespaldas –este sí, perfectamente identificable– llevando amablemente a la pareja unos croissants.

La información del semanario, según el cual estos encuentros cerca del Elíseo se han ido produciendo al menos desde junio del 2013, no hace sino confirmar un rumor que corría insistentemente desde hace meses. En marzo del año pasado, la intensidad de los comentarios difundidos por internet llevaron a Julie Gayet a desmentir públicamente toda relación con el presidente y a presentar una demanda contra los responsables –anónimos– de la propagación del rumor. Ayer, la actriz se limitó a pedir, a través de su abogado, al semanario que retirara la información de su página web. Lo que la dirección de la revista se dijo dispuesta a hacer.

Recientemente, la aparición de Gayet en un programa de televisión para promocionar su última película –Les Ames de Papier– fue objeto de numerosas bromas. Su coprotagonista, Stéphane Guillon, sin poder contener la risa, dijo: “Hollande estuvo en el rodaje, le gustó la película... a su mujer, mucho menos”.

François Hollande, de 59 años, y Julie Gayet, de 41, se conocen desde hace al menos dos años, cuando la actriz y productora se comprometió activamente en la campaña electoral del líder socialista en el 2012 (en un videoclip, calificaba al entonces candidato de “humilde” y “formidable”). Casada en el 2003 con el guionista argentino Santiago Amigorena, del que está separada, Gayet tiene dos hijos de 12 y 13 años. Hollande, por su parte, no se ha casado nunca. El presidente tiene cuatro hijos –de entre 21 y 29 años–, fruto de su larga unión con la ex candidata socialista al Elíseo en el 2007, Ségolène Royal. Ese mismo año se separó para unirse a Valérie Trierweiler, de 48 años, periodista de Paris Match con quien había iniciado una relación paralela un año atrás.